JoJo...

Una frase dice más que mil palabras. Ni siquiera se cuando fue la última vez que escuche eso. Como sea, lo único que siempre recuerdo es el momento en el que esto se puso en práctica. Fue en uno de esos días en los que caminaba sin rumbo. Era tan soleado que creías que toda la ciudad la deberia estar pasando bien. Pero yo era la excepción al ambiente. En fin, luego de tanta reflexión andante decidí por fin colocar un rumbo.

Llegue a "Red Door" una cafetería bastante popular en la ciudad. Fue ahí donde la conocí. Lo primero que me interesó fue su contextura asiática. Veras pues no creía normal ver a alguien asi en mi país, en Japón tal vez pero no aquí. Lo segundo que me intereso fue su parche en el ojo derecho. ¿Porque lo tendría? Ni siquiera tuve que observarla ella misma comenzó nuestra charla.

-Sabes, afuera hay un pájaro sin un pie. Es triste, su vida solo es en las nubes y ahora ni siquiera puede levantarse

Vi en la dirección en la que sus ojos apuntaban y logre ver al animal tirado. ¿Porque me habra salido con ese comentario?. Ni siquiera la conozco.

-Disculpa, ¿Tú quien eres...?

Se lo pensó un poco y finalmente me respondió.

-Soy JoJo

 La vi incrédulo y no pude reprimir una pequeña risa que solté al unísono. ¿Que clase de nombre era ese?

-Gracioso, ¿Verdad? Lo se, desde niña fue un tema entre mi familia del cual reirse.

-Perdon pero, ¿Porque me dices algo como eso? Ni siquiera te conozco.

La chica me sonrió y después respondió a mi incognita.

-No es por nada, me recuerdas a mi novio. Supongo que pensé que seria fácil hablar contigo. 

No creo que haga falta comentar el resto de la charla. Simplemente porque dijimos cosas que no creo que deban saberse. Bueno, hablo en plural sin embargo yo dije más de lo que escuche. Era fácil hablar con esta chica. Pasamos horas sentados en aquella sala con un café de por medio. En tanto lo que ella contó no era algo que pareciera exageradamente extraño. 

Me dijo que hace poco tuvo problemas con su novio y que esa era la razón de su comentario inicial. Pues simplemente quería ver una reacción que le diera un visto bueno para hablar conmigo. El parche en el ojo, por mas cliché que parezca era por uno de esos cosplays asiáticos. No estoy seguro cual, pero tampoco era algo que importara. Luego de una amistosa y agradable charla finalmente nos despedimos. Eso si, me dio su teléfono por si en una de esas le apetecía  volver a hablar conmigo. Durante el transcurso de la semana no pude sacarla de mi cabeza. ¿Que era lo que me pasaba...?

Hola... soy yo, perdon si al leer estas paginas no sientes lo mismo que al inicio. Pero nunca imagine que este seria el desenlace de esta historia. Mis palabras no tienen sentido, ¿Cierto? No hay problema ahora te lo explico, más bien me veo necesitado de hacerlo... 

JoJo. Esa chica de nombre cómico que me había dado unos minutos de felicidad en un dia gris... Falleció... O si quieres algo más preciso ella decidió suicidarse. Durante los días siguientes a nuestro único encuentro pase por la misma cafetería intentando encontrarla. Se lo tonto que suena, pero nunca tuve el valor de llamarla... Un cobarde eso es lo que soy... En fin, al cabo de un tiempo salió la noticia. Mi rostro quedó congelado, ¿podría ser esa la chica que conocí aquel día? La verdad se hizo ver y al cabo de otro tiempo el novio compartió su carta de despedida. No la pondré entera pero si la parte que considero más importante:

Era como si todas las pesadillas que había tenido finalmente me hubieran alcanzado. ¿Como era posible? Las cosas que soñaba estaban sucediendo realmente. Solo era ignorante en ese momento. Todo era demasiado tarde para saberlo. Nunca he hecho nada en mi vida. Solo me han pasado cosas malas, por qué debería estar tan torturada, tengo que trabajar duro estos días, quiero olvidarme de todo esto, quiero controlar mis emociones, no lloro todas las noches, pero no puedo hacerlo, no puedo hacerlo, está bien. Soy demasiado injusta, no me lo puedo permitir. 

Después de que muera, te envolveré día y noche, y nunca más te dejaré.

La carta en si no tenia mucho sentido. Y mucho menos creerías que lo escribiría la chica que conocí aquel día. Pero al instante recordé la primera frase que me lanzo al conocernos... Quien sabe. Ni siquiera se si esta historia importa. Como sea... Buscare otra idea con la cual poder distraerme. No quiero más pena en mi vida.