KEN
¿Haz conocido alguna vez a una persona, tan egocentrista que tiene la costumbre de aplastar a los más "bajos"? Yo si, y la verdad es que hasta me da pena decir que por un tiempo yo fui su "amigo" y lo pongo entre comillas, porque no se si para el era lo mismo.
Para no entrar en detalles personales, le voy a dar a este personaje el nombre de KEN. Pues apartir de ahí, debo contarte algunas anécdotas molestas de este hombre. Antes que nada he de decirte, Ken, dentro de todos sus talentos, es autor, y como tal a publicado varias novelas (no diré sus nombres por la misma razón de privacidad), las cuales han sido consideradas todo un éxito en ventas, haciendo todo un gremio al rededor de su figura.
Seria muy fácil criticar a los fans, pero no voy a negar de que aquella admiración que sentían, solo sirvió para encender la mecha, porque apartir de ahí, él cambio. Y con eso, nuestra amistad se fue fragmentando de a poco. Carmen (otro nombre inventado) la novia del imbécil, también era una autora, pero lamentablemente, pese a que poseía varias novelas terminadas (y esto lo se porque varias veces las compartio a conocidos para pedir opiniones) debido a la sombra que era en comparación a la gran figura de su pareja, había perdido confianza, y con eso la oportunidad de publicarse. Teniendo que conformarse con ver como su novio cumplía el sueño que ella nunca pudo. Por lo que rápidamente veía como cada día perdía sus ánimos. Y de echo, se lo dije a Ken, lanzándole una de las típicas frases fuertes que aveces se dicen entre amigos (y sobre todo en chile) "oye ponte vivo, fíjate en tu novia". Uno creería que tras esta señal de alerta todo novio atento se iría fijando mas de cerca en la salud emocional de su pareja. Pero bueno, si la historia fuese tan típica no la estaría contando. Pues cierto fue, que con tanta gira y firma para promocionar el libro, fue poco (o muy poco) el tiempo que le designo. Y como si esto no fuera suficiente, a las semanas lo encontró teniendo sexo en su auto con una de sus fanáticas.
Ella me lo contó todo, pues tras ver la escena vino llorando a mi departamento buscando alguna especie de consuelo (pues por si todo lo ultimo no fuera poco, también no tenia muchos amigos). Al poco supe, de nuevo de boca suya, de que el se hizo la víctima, "que estaba muy distante, que hace ya rato que no te entendía" etc, etc... En cuanto escuche esto tuve el debate mental (que todos nos hemos echo en su momento) diciéndole al hombre sus varias cosas, "¡Pues claro que estaba distante, te dije que lo conversaran! ¡¿Que es eso de que no la entendías, si nunca te acercaste a hablarle?! IMBÉCIL, y sacando al "Dross" que llevo dentro, ¡Cabeza de pija!
Pero bueno. Aquel incidente fue como tirarle una roca muy grande, al cristal de nuestra amistad. Que por suerte era de calidad a prueba de balas, por lo que decidí volver a hablar con él. No se que conseguiría, pero como buen amigo le daría la oportunidad de defenderse de tan bochornoso actuar.
Pero tal fue mi sorpresa al momento de encontrarlo en en sillón con dos putas (y totalmente ebrio) que, sin pensarlo mucho me le tire encima para poder darle sus buenas raciones de puñetazos. Las chicas pronto se apartaron, y el estaba tan alcoholizado que ni siquiera pudo defenderse (o levantar siquiera los brazos). Finalmente luego de eso no lo volví a ver más. En cuanto a Carmen le ofrecí mi casa, por si quería pasar unos días, pero declino amablemente mi oferta, diciendome que prefería llamar a su hermana que vivía en la zona. En cuanto al sujeto, pues no digamos que la paliza le haya enseñado algo. Pues a la semana siguiente lo volví a ver en los medios. Recibiendo el premio de la editorial que lo había publicado, debido a su éxito de ventas. En cuanto vi esa sonrisa, y escuche el discurso barato que se mando. Decidí no volver a prender la televisión (al menos hasta que la fiebre por el pasara).
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